“Ya nada de creacionismo, dadaísmo, paroxismo, expresionismo, sintetismo,
imaginismo, suprematismo, orfismo, etcétera, etcétera, de “ismos” más o menos teorizados
y eficientes. Hagamos una síntesis quinta-esencial y depuradora de todas las tendencias
florecidas en el plano máximo de nuestra moderna exaltación iluminada y epatante,
no por un falso deseo conciliatorio, -sincretismo.- sino por una rigurosa convicción
estética y de urgencia espiritual (…) (1). De esta manera, absolutamente revulsiva
y revolucionaria se expresaba el principal “teórico” del movimiento mexicano llamado
Estridentismo (1921-1926), Manuel Maples de Arce. Principios de “fascinación estética”,
más que de formatos y fórmulas teóricas, a las que se adhirio y anexo Germán List
Arzubide (1898-1998). Y con él Arqueles Vela, Luis Quintanilla, Germán Cueto, Leopoldo
Mendéz y Salvador Gallardo, en la ciudad fantástica de Xalapa. Movimiento que entre
cosas, del que Octavio Paz nunca quiso saber nada, y del que ellos tampoco, pero
que en cambio un vidente como Xavier Villaurrutia,
inmenso teórico, lleno de lo teatral, sí poseyo. Quizá de esa forma, se oculta para
uno la trascendencia que tiene y la revelación
que constituye para el otro, el movimiento Estridentisa.
Tanto Arzubide
como los otros miembros del nuevo movimiento tenían y sentían una inmensa proximidad
sensible, intuitiva y crítica a las propuestas y a las tentativas del Futurismo
(1909) cuyo teórico había sido F. T. Marinetti. Es evidente que el “etcétera” allí mencionado, involucra y relaciona
otros movimientos modernos no mencionados, y de
la misma manera y en la misma dimensión,
sí nos dice con exactitud y en forma más concreta de su crítica iconoclasta e irreverente
contra todos los “ismos” que se formaron
y se construyeron en ese momento. Y que en un cierto sentido, contribuyeron a obstruir
cualquier estética y estilo nuevo, que no obedeciera a esa estructura y a esos formatos,
que de por sí no eran más que un invento no muy trascendental y tampoco decía mayor
cosa sobre todo, de aquellos que no establecieron sus principios, excluyendo a los
adherentes. Como lo decía irónicamente Jacques Vaché contra el exceso de simbolismo,
promovido y propiciado por los “imitadores”: nada más simbólico que los símbolos,
era su manera de criticar radicalmente a estos.
List Arzubide,
escuchó entonces aquel tumulto y turbulencia de las sensaciones estridentistas (sensacionismo
lo llamo Fernando Pessoa); y leyó en los textos de Maples de Arce aquello de: “Me ilumino en la maravillosa incandescencia de
mis nervios eléctricos”, y en la misma ilación, con la misma intensidad y tensión
lo hizo en y con los textos Futuristas, en sus invenciones modernistas y en sus
invectivas a toda la oxidación, la caducidad, la muerte de lo clásico; como decía
Marinetti: “Nosotros cantaremos (…) a las locomotoras de ancho pecho que piafan
en los raíles como enormes caballos de acero embriados con tubos, y el vuelo deslizante
de los aeroplanos cuya hélice ondea al viento como una bandera y parece aplaudir
como una muchedumbre entusiasta” (2). Todo esto, más los movimientos de la naturaleza,
los de su naturaleza y sus obsesiones, realizaron esa transformación nueva, que
es la que hace y adquiere relievancia y sentido dentro del Estridentismo mexicano.
Temas que cada uno de ellos, como lo hace Arzubide, abordan y en los que hallan
su estilo, su forma de invención, sus hilos conductores, sus principios y la huella
del fantasma. En Arzubide son más íronicos, más llenos Umor, más, si se quiere estridenciales.
Y que no solamente
hacen relación a un texto, a un ensayo, a una memoria sino también a la realización
de eso que soñaba, de eso que quedaba sin decirse, de eso que era su intención de
transformar el mundo, y que se lo hizo saber y se lo dió a conocer a Baciu, quién
siempre expuso su interés por el movimiento Estridentista. Intención la de Arzubide
de realizar el ideal revolucionario, por medio del cambio de la relación estética
entre los hombres, haciendo que la realidad se vea, que la realidad sea examinada
hasta el exceso, inclusive, si es necesario, nombrarla desde lo absurdo. Técnica
“estructurada” por Alfred Jarry, la del absurdo, que es medio para transparentarla
y poder transformarla.
|
|
Es verdad: se
odian y se critican los “ismos”, pero sin duda, para abordarlos en la proximidad
de su esencia ó no; y no para obedecerlos fanáticamente sino para destruirlos y
en esa destrucción crear una forma nueva: para él, la arzubideana. Ha muerto un
estridentista. Eso es nada y todo. Habrá en la ciudad de Estridentópolis -la que realizó la verdad estrindentista: ciudad absurda,
desconectada de la realidad cotidiana, corrigió las líneas rectas de la monotonía
desenrollando el panorama. Borroneada por la niebla, está más lejos en cada noche
y regresa en las auroras rutinarias (…)”-, y aquí entre nosotros, ruidos no
de Trompeta sino de claxones.
NOTAS
1.
SCHNEIDER, Luis Mario. El Estridentismo, México,
1921-1928. México. Universidad Nacional Autónoma de México. 1985.
2.
DE MICHELI, Mario. Las vanguardias artísticas
del siglo XX. Madrid, Alianza Editorial; Col. Alianza Forma. Undécima reimpresión.
1994.
*****
OSCAR JAIRO GONZÁLEZ HERNÁNDEZ
(Colombia, 1957). Poeta, ensayista, uno de los editores de la revista Punto Seguido. Página ilustrada com
obras de Valdir Rocha (Brasil, 1951), artista convidado desta edição de ARC.
● ÍNDICE # 103
Editorial | Os horizontes não param de brotar
ESTER FRIDMAN | Como tornar-se uma obra de arte - a escultura de si mesmo
GABRIEL JIMÉNEZ EMÁN | Algunas variaciones sobre la metamorfosis de Franz Kafka
HAROLD ALVARADO TENORIO Piedra y Cielo 1936-1942
http://arcagulharevistadecultura.blogspot.com.br/2017/10/harold-alvarado-tenorio-piedra-y-cielo.html
LILIAN PESTRE DE ALMEIDA | O teatro de Aimé Césaire: Une saison au Congo
LILIAN PESTRE DE ALMEIDA | Pier-Paolo Pasolini et l’anthologie de Mario Pinto de Andrade sur la poésie nègre de langue portugaise
MARIA LÚCIA DAL FARRA | Florbela Espanca e Ada Saffo Sapere: Alentejo e Reggio Calábria no feminino
http://arcagulharevistadecultura.blogspot.com.br/2017/10/maria-lucia-dal-farra-florbela-espanca.html
OSCAR JAIRO GONZÁLEZ HERNÁNDEZ | En la muerte de Germán List Arzubide (1898-1998)
OSCAR JAIRO GONZÁLEZ HERNÁNDEZ | Meditaciones antimetafísicas
PIER PAOLO PASOLINI | La Résistance nègre
ROXANA RODRÍGUEZ | Rubén Sicilia y el Teatro del Silencio
ARTISTA CONVIDADO | VALDIR ROCHA | ELVIO FERNANDES GONÇALVES JUNIOR | Valdir Rocha, um olhar sobre o abismo
*****
Agulha Revista de
Cultura
Número 103 | Outubro
de 2017
editor geral | FLORIANO
MARTINS | floriano.agulha@gmail.com
editor assistente
| MÁRCIO SIMÕES | mxsimoes@hotmail.com
logo & design
| FLORIANO MARTINS
revisão de textos
& difusão | FLORIANO MARTINS | MÁRCIO SIMÕES
equipe de tradução
ALLAN VIDIGAL | ECLAIR ANTONIO ALMEIDA FILHO | FEDERICO RIVERO SCARANI | MILENE MORAES
ALLAN VIDIGAL | ECLAIR ANTONIO ALMEIDA FILHO | FEDERICO RIVERO SCARANI | MILENE MORAES
os artigos assinados
não refletem necessariamente o pensamento da revista
os editores não se
responsabilizam pela devolução de material não solicitado
todos os direitos reservados © triunfo produções ltda.
CNPJ 02.081.443/0001-80
todos os direitos reservados © triunfo produções ltda.
CNPJ 02.081.443/0001-80
Nenhum comentário:
Postar um comentário