terça-feira, 18 de novembro de 2014

A las vueltas con el libro-objeto y sus sombras: diálogos con Mónica González, Mario Dux Castel y Floriano Martins | Madeline Millán

Madeline Millán

1. Diálogo con Mónica González

Mónica GonzálezEsta es la primera de tres entrevistas sobre el tema “El libro-objeto”. Agradecemos a Roberto Reséndiz Carmona por la oportunidad de elaborar este proyecto de entrevistas durante su XIV Encuentro Internacional de Poetas en Zamora, también a Floriano Martins, quien publicará estas entrevistas en Agulha y a José Angel Leyva, quien también nos ha abierto sus puertas para publicarlas. Es parte de un futuro proyecto a ser filmado más adelante en el DF de México durante la Feria del libro en el Zócalo en octubre de este mismo año. Y, por supuesto, gracias a Mónica González y a Mario Dux Castel. [MM]

MM ¿Qué es un libro-objeto?

MG Podemos definir este término como la elaboración artesanal de un libro. Las variaciones actualmente hacen difícil una definición precisa. De entre los aspectos más relevantes podemos subrayar el interés por la exacerbación del objeto. El libro tiene la misión de llevar a buen puerto su contenido, y finalmente ese es su objetivo, sin embargo, el objeto libro por sí mismo también es un agente comunicante y un objeto artístico, plástico. Su carácter artesanal le imprime su carácter único e irrepetible, coleccionable y personal.

MM ¿Existe una historia que nos puedas contar brevemente o citar libros que nos     puedan servir para estudiar este tema? ¿Cuál es la tradición en México?

MG El origen de la edición en libro-objeto, se haya en los movimientos de vanguardia. Un ejemplo interesante de lo que se puede considerar libro-objeto se encuentra en algunas producciones del poeta chileno Nicanor Parra, en que los textos están escritos sobre una especie de tarjetas que en conjunto forman un paquete. En Italia, quienes se atrevieron más a deconstruir la forma poética fueron los futuristas, con el uso de mayúsculas, onomatopeyas, y una particular disposición tipográfica para producir efectos visuales. Una experimentación similar se encuentra en la década del ´60 con los autores de la neo-vanguardia. En este tipo de poesía, los ejemplos más interesantes son aquellos, como en el caso de “5 metros de poemas”, en que la experimentación formal no es sólo un mero juego técnico sino que sirve para relevar la tensión de los pasajes poéticos. Este poemario compuesto por 18 poemas, escrito por Carlos Oquendo de Amat, entre 1923 y 1925 fue publicado por primera vez en Lima, en el año de 1927 por la editorial Minerva. El título proviene del poema “Reclame” o “Réclam” de su último verso “compro para la luna cinco metros de poemas”. La carátula es diseñada por Emilio Goyburu: cuatro rostros de teatro delante de un telón. Impreso originalmente en serigrafía. Posterior a esta edición la editorial independiente “Textofilia”, hace una reedición de este poemario (México, 2009), la impresión es en offset, pero no por ello se pierde la belleza de esta edición. En realidad, existen artistas visuales en cuyos trabajos podemos ahondar: Joan Brosa (Barcelona) y sus poemas visuales, Johanna Drucker (EUA) y sus libros de artista, Antonio Gómez (Cuenca) y su exploración visual poética, Nahum B. Zenil (México) y sus libros fetiche, por mencionar algunos.
En México, nos podemos referir al poemario “Blanco” de Octavio Paz, (México, 1967) publicado por Editorial Joaquín Mortiz, diseñado por el maestro Vicente Rojo e inspirado en “5 metros de poemas”; cabe decir que ambas publicaciones retoman la tradición de la encuadernación japonesa y la técnica de reproducción en papiro. Existe otro libro-objeto, también de Octavio Paz, del cual habla Elena Poniatowska en su libro “Las palabras del árbol”, realizado en Francia por el escultor argentino Krasno. Protegidos por una caja de ámbar, los poemas están escritos sobre unas hojas de algodón, piedra, cal y cartón; el interior guarda una cinta grabada con los versos de Paz. A partir de entonces, en México han sido muchos los intentos por salvaguardar esta forma de publicación alternativa. Incluso la Secretaría de Cultura del Gobierno del D.F., publicó una edición conmemorativa de otro poema de Octavio Paz “Piedra de sol” (1998), esta edición nos remite a “Blanco”, diseñada por Alejandro Magallanes y Fernando Villafán, la distribución de este libro es masiva y gratuita, un regalo invaluable para los citadinos.
La producción de ediciones libro-objeto, habla del compromiso humano para con la literatura; por ello, miCielo Ediciones se ha sumado a la producción y promoción de este remanso que no ofrecen las editoriales convencionales, y mucho menos los grandes sellos editoriales.

MM ¿Cómo, cuándo y por qué te nace el deseo de hacer este tipo de libros? ¿Cuál es tu aportación dentro de este formato-libro y que posibilidades o relaciones pueden desarrollarse ahora o más adelante con los medios de multimedia?

MG La edición de libro-objeto, nace como una alternativa de publicación, son libros necesarios, con alma. Hace casi tres años trato de explorar esta forma de publicación, experimentando con los formatos, contenedores, materiales. Creo que mi aportación más importante es la de incluir autores noveles, cuyo trabajo no ha sido publicado a falta de espacios flexibles para ello. También he buscado mantener precios accesibles para la comercialización entre un público ávido de conceptos frescos.
La idea de que un libro-objeto objeto pueda transformarse en un medio multimedia le restaría la parte humana a mis ediciones. Los medios multimedia sólo los uso para la difusión del proyecto en los espacios que ofrece la Internet: blogspot, facebook, etc.

MM ¿Cuáles son los problemas con los que se encuentra un autor-poeta que hace libros en esos formatos de libro-objeto?

Ramón Oviedo
MG Se dice del libro que está en crisis. Yo nunca he pensado en ello, preferí buscar alternativas para editar libros de autor y luego este proyecto se volvió una plataforma para dar a conocer la obra de otros autores. Ahora estoy por editar autores del interior de la República y del ámbito internacional. Mucha gente me ha preguntado si no tengo problema para la comercialización y la distribución; yo sólo sé que promuevo tirajes cortos que se venden en su primera presentación, casi en su totalidad. También me han dicho que estos libros “no tienen presencia”, ante lo cual respondo que no trato de competir con los grandes sellos editoriales, mis libros se basan en la creatividad y el ingenio, están foliados y firmados por su autor, son únicos e irrepetibles. Autenticas piezas de colección.

MM ¿Dónde empieza y termina el libro desde un punto de vista filosófico y/o epistemológico? Nos parece que se habla de la crisis del libro y de una nueva búsqueda según las nuevas tecnologías. Háblanos sobre esto.

MG El libro, durante más de cinco mil años ha sido el instrumento que ha permitido la transmisión del conocimiento entre pueblos y culturas diferentes, desde la copia a mano de los amanuenses hasta la invención de la imprenta, los materiales escriptóreos (el papiro, la arcilla, la seda, el papel, etc.) El libro tradicionalmente ha sido entendido como puro "contenido", pero también como vehículo de expresión artística y cultural.
El lenguaje visual busca dentro de estructuras (libros) nuevas fórmulas de asociación y crea con formas propias nuevos códigos de comunicación, utiliza conjuntamente nuevos signos y símbolos, elementos fonéticos y visuales, elementos tipográficos, valora el color y la forma, valora el signo semántico como tal signo y el espacio o soporte donde va a desarrollarse la obra, dándole a la página categoría de espacio artístico en potencia, espacio donde se puede exhibir un trabajo. Junto al lenguaje semántico busca el estético.
El lenguaje tal como se ha venido entendiendo, tiene sus limitaciones, hay sensaciones que al intentar expresarlas, nunca quedamos satisfechos de los resultados, estas situaciones son las que una variante (libro-objeto) ayuda a resolver.
La tecnología ha masificado los medios de comunicación. El libro es un medio de comunicación, el cual no creo vaya a desaparecer, más bien se transforma y adapta a los nuevos tiempos. No podemos renunciar al libro, lo único que está en crisis es su soberanía.

MM ¿Quieres añadir algo más, tu página o páginas que te gustaría que viéramos?


2. Diálogo con Mario Dux Castel

Mario Dux CastelMario Dux Castel me entregó un CD que se había editado recientemente acompañando así su libro-objeto 29 poemas de noviembre que se rompió. Digamos que simplemente dejamos de escuchar a Coltrane para escuchar su lectura con sonidos.  Algo que también hizo en Zamora, México, durante el Encuentro internacional de poetas (organizado por Roberto Reséndiz Carmona en junio 2011).  Allí Mario utilizó un envase plástico en su lectura poética, intentaba crear musicalidad (una de las vertientes de la música estridente y experimental) a partir de la idea de los sonidos de la calle.  Habíamos hablado por ello de “Blue Man Group”, un show permanente que lleva años presentándose en Manhattan. Esos sonidos se nos convierten en ruidos o en un tipo de violencia tan comúnmente registrada y naturalizada, a pesar de ser otro modo de contaminación, en nuestro medio ambiente citadino.  Sí, creo que la violencia es un plantamiento sugerido en su poesía, pero creo que lo podemos dejar pendiente para la próxima vez cuando esperamos filmarlo en la Feria del libro en el Zócalo ahora en agosto. [MM]

MM ¿Qué es un libro-objeto?

MDC Un libro objeto es aquello que desborda la imaginación y tentación de generar una publicación no convencional que no dependa del ritual ya conocido. Un libro-objeto puede tener la forma, textura, singularidad y la no-pertenencia en los estándares editoriales. Su forma y fondo son tan libres que se puede generar con los materiales que se tengan a la mano sin restricción alguna, sin pedir permiso a la estructura de un libro como tal. Su formato puede tener distintos contenedores: una bolsa de pan, una botella, una caja y su material puede ser: papel reciclado, vidrio, cartón, aluminio, unicel, no existe un límite.

MM ¿Existe una historia que nos puedas contar brevemente o citar libros que nos puedan servir para estudiar este tema? ¿Cuál es la tradición en México?

MDC La historia del libro-objeto nos remite a los papiros, pinturas rupestres, escritura primitiva. Creo que Moisés tuvo en sus manos el primer libro-objeto por excelencia y que cambió la historia de la humanidad. De ahí que en adelante las formas de entablar el diálogo con nuestros semejantes, han variado al llegar al tiempo actual, donde la tecnología forma parte de todo lo que nos rodea. El libro se ha modificado de tal forma que existen libros digitales que se pueden descargar a un Ipod, o al Black Berry. Esta situación nos lleva a obtener los libros en formatos también no convencionales.
En 1963 Edward Ruscha edita Twenty-Six Gasoline Stations (26 Estaciones de Gasolina); en 1966 Every Building on the Subset Strip (1000 ejemplares desplegables en forma de acordeón).
El futurismo, Surrealismo, Dadaísmo y las vanguardias que le siguen, forman parte de este conglomerado de creatividad y formas emergentes. Así, poetas como Mallarmé, Apollinaire, Tristán Tzara, Oquendo de Amat consumaron su experimentación en esta tan dedicada y creativa tarea al descontextualizar los textos y llevarlos a otras  formas de escritura y publicación.
En México el Estridentismo y su desfachatada e irreverente actitud en todas sus ramificaciones pintura, grabado, escritura y en la poesía publicando la hoja de “Vanguardia Actual N°1” que apareció en los postes del primer cuadro del centro de la ciudad de México, libros como “Andamios Interiores” (1922) de Manuel Maples Arce, “Urbe”(1924) “El Movimiento Estridentista” (1926) de Germán List Arzubide, que aunque no se pueden definir como libros-objeto por la forma de publicación o tratamiento de la tipografía; pasan a formar parte de esta tradición como una referencia obligada de la poesía en México.
Pocos fueron los escritores contemporáneos que publicaron su poesía en este formato, encontramos a Octavio Paz con los poemarios “Piedra de Sol” y “Blanco”.  En la actualidad podemos hablar de artistas visuales como Felipe Ehrenberg, quién basa su obra plástica en el arte-objeto, aproximándose con sus libros de artista a lo que denominamos libro-objeto.
Hoy día existen pocas editoriales que se dedican a la realización de libros-objeto, en este contexto podemos nombrar a Ediciones Lago (ciudad de México), miCielo ediciones (ciudad de México), La Cartonera (Cuernavaca) Ediciones Limón (ciudad de México).

MM ¿Cómo, cuándo y por qué te nace el deseo de hacer este tipo de libros? ¿Cuál es tu aportación dentro de este formato-libro y que posibilidades o relaciones pueden desarrollarse ahora o más adelante con los medios de multimedia?

Ramón Oviedo
MDC Durante un recital en la ciudad de México conocí a Mónica González Velázquez y una muestra de su trabajo editorial en miCielo ediciones. De ahí surge el proyecto de publicar “29 poemas de un noviembre que se rompió”. Contenedor de papel estraza de 16.0 x 24.0 cm; serigrafiado a una tinta en portada. Interiores impresos en papel cultural ahuesado de 95 kg. Totalmente ilustrado en interiores y portada por Demian Flores (Juchitán, Oaxaca). Su tiraje fue de 100 ejemplares foliados y firmados por el autor. 29 poemas que se ligan a la tradición del verso libre y a la experimentación sonora.
Al relacionar la tecnología y la poesía se genera otro tipo de lenguaje, lo que hoy se da en llamar poesía visual, esta recurre a la fotografía, vídeo, cine, audio. Logrando así un aprovechamiento de todos estos medios, dejando así un registro electrónico que genera otro tipo de publicación.

MM ¿Cuáles son los problemas con los que se encuentra un autor-poeta que hace libros en esos formatos de libro-objeto?

MDC No creo que sea un problema, más bien es aprovechamiento tanto en materiales como en imaginación, porque se sale de los cánones y se deja un registro distinto de lo que es un material poético y si lo llamamos una desventaja, el problema es el tiraje si nos referimos a la distribución, ya que son tirajes cortos y únicos. Esto depende del diseño que el autor quiera. Es una ventaja porque se le tiene más cuidado al diseño material. Cualquier autor tendría que empezar a apostar por este tipo de publicaciones y dejar un registro de una forma distinta de publicación; esto captaría a un público más joven e inquieto y quitarles el prejuicio de que la poesía es aburrida.

MM ¿Dónde empieza y termina el libro desde un punto de vista filosófico y epistemológico? Nos parece que se habla de la crisis del libro y de una nueva búsqueda según las nuevas tecnologías. Háblanos sobre esto.

MDC Desde el punto de vista filosófico el libro empieza en la mente del escritor, permitiéndonos conocer los estados emocionales, vivencias, atinos y desatinos en su paso por la vida y desde el punto de vista epistemológico el libro deja plasmado el conocimiento de todo lo que nos rodea. Trasciende al paso de los años y recurrimos al libro en todo momento.
El libro no está en crisis, la crisis radica en la forma de publicar los libros, en los costos o la imposibilidad de adquirirlos; es por ello que se recurre a las nuevas tecnologías para tener acceso a ellos de una manera gratuita. El estudio de la crisis del libro debe ser más amplio. Se debe ahondar en la transformación que ha sufrido para llegar a todo público.

MM ¿Quieres añadir algo más, tu página o páginas que te gustaría que viéramos?

MDC Seguiremos trabajando dentro de esta tendencia para seguir aportando nuevas formas de publicación de la poesía, para dejar un registro a las generaciones por venir y así compartir la inquietud y la curiosidad que nos tiene que acompañar en todo momento.
Youtube: Marcela Lango | Talía Barredo | Libro-objeto en Kirigami3 | Glvtinator el libro arte-objeto de Aristídes Alemán | s/t libro-objeto N°17 | Libro-objeto st.18 El amor | Exposición el libro como objeto artístico en “Artium 2007”.

3. Diálogo con Floriano Martins

Floriano MartinsEsta larga introducción o historia puede saltarla el lector, las entrevistas son un modo de conocer a alguien a quien deseamos mirar de más cerca, en otra dimensión más humana. Con esto en mente, les cuento cómo es un poeta que se le va develando a otro poeta por caminos de la poesía y de la amistad. Nos conocimos en el sur de España, muy concretamente durante el Otoño Cultural Iberoamericano de Huelva. Decir conocernos es mucho. En una esquina de una larga mesa regada de poetas de México, Puerto Rico, República Dominicana, El Salvador, Colombia, Argentina, Brasil y otros países, cenan los poetas y editores Uberto Stabile, Angel Leyva, Floriano Martins y Eduardo Mosches (con quien compartí más, al otro lado de la mesa). Yo sé que están allí pero en aquel final también estaba finis terrae. No fue sino en un bus camino a la casa en Moguer donde había vivido el poeta Juan Ramón Jiménez, que intercambiamos unas palabritas. El poeta Ángel Leyva, a quien conocí por haber publicado en Alforja hace más de 10 años y luego habernos visto brevemente en un evento de libros y poesía en el Zócalo, nos presenta. Estos son los antecedentes de este breve encuentro. No dijimos mucho, apenas habremos tímidamente sonreído desde nuestros asientos vecinos. Se acabó allí el diálogo, no dijimos más. Regreso a Nueva York y FM, si no me equivoco, a Brasil. Días después, me llega un correo de FM y le comento que su revista Agulha ya no me llega por este medio. Entonces, iniciamos conversaciones salpicadas de descubrimientos maravillosos. El poeta y editor comienza a enviarme fotografías y canciones. Nuestro intercambio cibernético inicia con FM en medio de un proyecto poético-fotográfico del Sr. Seriotis, nombre que le pusimos a uno de sus personajes, pues mi primera impresión de él fue, según le confesé más tarde, que era muy serio. Y tal seriedad no hacía sino preludiar la complicidad de nuestra risa. Cómo me hace reír FM, llena mis días de sorpresas que no terminan de sucederse. La última, un “malentendido” que a mí me da por reír de lo lindo. Le había estado contando sobre un maravilloso enamoramiento que estaba ocurriéndome después octubre (fecha cuando nos conocemos). Le digo, “te cuento el milagro pero no el santo”. Pasan nueve meses y un día le anuncio que ese amor cibernético a la distancia parecía entrar a otra dimensión. El sueño de luz que iba a parir, tenía que soñarlo sola para entrar a un nuevo estado de conciencia. Entonces FM me responde, “No te enojes, pero hasta ahora había pensando que hablabas de mí”. El Sr. Seriotis, el de las continuas sorpresas que pensaba que iba a enojarme, me hizo reír con ganas una vez más, aligerando el peso de ese momento difícil; tirándole el ancla a su amiga enamorada y llenando las horas con sus renovadas y necesarias alegrías. Porque el humor de FM es tan ilimitado como sus ideas. Pero, lo más importante, no termino de descubrirlo. Esta entrevista surge a mi regreso del Encuentro Internacional de Poetas en Zamora, México, que realiza exitosamente Roberto Reséndiz en junio. Durante mi estancia tuve la suerte de escuchar a poetas que hacían con la poesía todo lo que la imaginación les permitiera. Movida por la curiosidad y el deseo de saber más, entrevisté a dos poetas mexicanos (a la poeta y editora Mónica González y a Mario Dux Castel). Ellos me obsequiaron con libros-objetos. Me interesó explorar un tema por el que ya venía intrigada a partir del frasco de poesía, Dosis, de la poeta puertorriqueña Mayda Colón. Dentro del pomo aparecen unos poemas que se abren al lector de forma no convencional. En uno de los correos de Floriano me dice que le interesa apasionadamente el asunto. Y yo comienzo una pregunta y otra y otra. Sí. La entrevista que ahora van a leer. [MM]

MM Floriano, cuéntanos de todos tus mundos posibles. Si puedes resume y termina en la próxima pregunta.

FM El mundo posible es el mundo de la supervivencia. Mis mundos son todos imposibles. ¿Cómo hago para terminar eso en la próxima pregunta?

MM (ese tipo de preguntas o comentarios como el anterior son los que recibo continuamente de FM y me hacen sonreír, pasarla bien) Sigamos. ¿Cómo se define la plástica y la poesía? ¿Cómo la defines tú desde tu experiencia creativa? Supongo que las definiciones van a sufrir cambios, como si la frontera de las definiciones para un poeta fuera un protocolo que va a cruzarse ilegalmente. ¿Haces eso?

FM La creación artística habita el territorio de la indefinición, así que no cabe en el sentido taxidermista que mueve el mundo de las definiciones. Yo tengo cruzado las fronteras visibles con naturalidad, gracias a la fuerza de mis escritos. No importa que trabaje con una computadora, una cámara fotográfica, pinceles, grabadoras u otros instrumentos. Pero en la creación lo que cuenta son las fronteras invisibles.

MM Según lo que me respondas te preguntaré la próxima pregunta o te comento a manera de diálogo. No estamos frente a frente, por lo cual, imitamos la conversa con necesarias pausas.
Ramón Oviedo
FM Bueno, entonces imitemos ahora el sonido de una máquina que repite incesante que no es hombre, no es hombre, no es hombre, por más que lo desee. 

MM ¿Por qué no se es hombre por más que se desee?

FM Es todo un dilema de la criatura que busca su identidad frente la fascinación de ser el creador. Hablamos con espantosa facilidad en inteligencia artificial y nos olvidamos que una canción es una creación, así como un robot, y los dos, cada uno a su modo, ganan vida propia. ¿Y cómo saber si quieren regresar a la matriz, back to the egg, si quieren ser dios? Es una trampa, o sea, ese es un dilema siempre del creador, jamás de la criatura.

MM ¿Si es lo invisible lo que tenemos, cómo hace el artista para que pueda verse, leerse, oírse? Digamos, cuando existe la necesidad de comunicar.

FM Yo creo que la comunicación en arte es este puente que conecta los dos mundos, visible e invisible. El lector de mis poemas es invisible para mí, pero yo soy visible para él, de alguna manera, a través del poema. Pero sin buscarlo, sin desearlo. No estoy seguro de que sea esta la fuente de la creación, eso que llamas de necesidad de comunicar. Yo creo más en una necesidad de comunicarse, o mejor, de uno descubrirse a sí mismo.

MM (He reflexionado en otras ocasiones sobre este asunto de la comunicación, no me explico cómo la usé de esta manera. Lo que demuestra que, tal como el asunto de la inspiración del que se nos pregunta todavía, siempre está ahí el dilema de “explicar” lo que hacemos, el cómo, etc.)
Háblame, en relación a la pregunta anterior, sobre la historia de tu trabajo de poeta. Es larga, intensa, heterogénea, pero algo podrás contar.

FM Yo no sé si propiamente larga, pero sí es intensa. La locura que era recibir todas las informaciones desde la infancia, con la música distinta que escuchaban mis papás, con la llegada de la televisión, el cine mudo, los cómics, las fotonovelas, los libros desordenados de temas múltiples de la biblioteca de mi padre, todo eso no me dejaba tiempo para pensar en separar el mundo en géneros, yo quería todas las cosas juntas, allí, al mismo tiempo. Bueno, entonces la primera manifestación fue eso de cortar figuras con tijeras y también la cosa típica de copistas, yo reproducía en guache y cartón las portadas de algunas novelas. Después nos juntamos en dos o tres chicos en la calle y montamos un espectáculo de música en el patio de mi casa, palco y platea improvisados, y presentábamos imitaciones de canciones brasileñas y extranjeras. Todo eso era la vibración espontánea con que el arte me tocaba. Después pasé a escribir cuentos, casi todos eróticos, hasta donde los recuerdo, en parte porque estaba enloquecido con la lectura de un libro en particular, los 12o días de Sodoma, del Marqués de Sade. Aunque antes otros libros tuvieron su importancia, este fue el libro que me llevado a escribir.

MM Haces fotografía, creo que pintura, música etc. ¿Cómo se mueve el poeta si tu poesía se mueve contigo en esos otros formatos? ¿Lee tu lector cosas parecidas en muchas de tus fotografías? ¿Existen puntos de contacto, convergencia, obsesiones?

FM Sí, la poesía está en todo. Ahora demos un salto porque todo eso lo recupero como expresión artística mucho tiempo después. Es verdad que desde el primero libro había un cuidado con el diseño gráfico, eso de invitar a un artista, un fotógrafo para que creara cosas a partir de los poemas, y también el hecho de que llegué a tocar (por suerte no ha demorado a visitarme la conciencia de que era un músico malísimo), la convivencia con gente de teatro y música, el trabajo con música en teatro, pero en esa época ya me había tocado el poema, así como el deseo de componer letras de canción popular. De todo eso ha quedado el poema, por un largo tiempo, escribía y escribía, sin parar. Y leía, pero manteniendo la diversidad en la lectura: novelas, poemas, ensayos, cómics, un poco de todo, incluso cosas no literarias. Siempre hubo esa vorágine de traer de todo para dentro, la mirada obsesiva por descubrir varios mundos al mismo tiempo. Y luego llega el gusto por la cosa crítica (ensayos, entrevistas, artículos para el periodismo cultural) y la traducción.

MM Estuve recibiendo, prácticamente desde el inicio de nuestras charlas cibernéticas, muchos de tus poemas y fotografías, por separado, pero también fotografías con poemas. Llevaban títulos con nombres de mujeres. ¿Es un libro con tus fotos y con poemas? ¿Cuál es la historia detrás de esos textos con fotos?

Ramón Oviedo

FM Antes de las fotografías los collages. El trabajo con las tijeras, haber conocido al surrealismo y las naturalezas muertas. Luego el deseo de trabajar solamente con cosas mías, así que pasé a fotografiar las imágenes que después utilizaría en los cortes, primeramente con tijeras, pero en seguida en la computadora. Pero ahora la técnica de corte ya no me seduce, la relación amorosa más intensa pasa a ser con las sobre-posiciones, buscando los espacios invisibles entre dos o tres imágenes, así como desvelando los puntos en común entre la figura y el paisaje. El poema, la imagen poética, sale a buscar otros modos de manifestarse y encuentra la fotografía como este segundo plan de realización. La fotografía como una extensión del poema. Cuando están juntos pueden ser percibidos como complementos uno del otro, pero cuando actúan solos son perfectamente independientes. Las primeras experiencias fueron en palco, la lectura de poemas acompañada de la proyección de las imágenes que luego ganaron movimiento a través del montaje de videos que tratan de incorporar también la música. Los videos son montados a partir de la construcción de maquetas utilizando las fotografías impresas en varias dimensiones y objetos. Posteriormente gana cuerpo la idea de un libro que pudiera ser el sitio de encuentro de eses lenguajes todos. Detalles de producción no lo permitió la realización de la idea original, así que sale el libro, pero solo con poemas y fotografías. No es una pérdida, para nada, porque planeamos el libro dentro de este nuevo espíritu, solamente un maridaje entre dos lenguajes. Ya el mundo de las mujeres, mejor, del femenino, de la sensibilidad, la pasión, y sus tormentos, dolores, violencias, los amores imposibles, todo eso es más antiguo y ya había tratado del tema en otros libros, muy especialmente en uno que se llama Estudios de piel (2004), libro en que mezclo varios lenguajes (poema, prosa poética, narrativa, crónica policial etc.) y que está relleno de personajes femeninos. Ahora en el caso de la fotografía tiene que ver particularmente con esa relación entre paisajismo y figurativismo que busco fusionar en algo propio, así que el cuerpo femenino encuentra abrigo en el mismo sitio que los ambientes naturales (montes, volcanes, árboles, cielos, lagos, todo) y juntos apuntan en la dirección de otra imagen.

MM Llegamos a la parte central que origina esta entrevista: El libro-objeto. ¿Qué historia, en general, nos puedes narrar? ¿Quiénes te anteceden o qué te sirve para hacer un libro-objeto? Tal vez quieras ampliar más sobre la respuesta anterior o decirnos si tiene algún proyecto similar.

FM Fines de los años 70, siglo pasado, he hecho un librito de poemas con la presencia de un artista plástico y sus trabajos en tinta china. La edición de este librito fue artesanal en el formato de hojas sueltas en un sobre (A4) que tenía en la portada una viñeta de otro artista. Esa condición artesanal era su disfraz de libro-objeto (risas). Pero lo más importante siempre me pareció la idea de buscar el otro, un cómplice, una pareja, sea en la creación en sí o en su producción. Años después miro los destrozos de una iglesia y pienso que sería el escenario perfecto para la escritura de un libro. Invito un fotógrafo amigo y por allí pasamos algunas mañanas sacando fotos y anotando imágenes. El libro, ahora impreso como un libro común, tenía cierta rusticidad en su design, buscando equivalencia con el ambiente plástico y poético del contenido. Ya en 2004 conozco a un escultor en Costa Rica cuyo trabajo está hecho con los horcones de una vieja iglesia en su país. Di inmediato me quedé apasionado por los personajes que desentrañaba de la madera y lo invité a hacer un libro conmigo. El resultado – ahora en mejores condiciones editoriales – tenía la misma raíz, o sea, el diálogo entre creadores y la producción de un objeto de arte, la concepción del libro como un objeto de arte. Pero que no se alejará del entendimiento del libro como un objeto de lectura. No estaba buscando un obstáculo a la lectura o convirtiendo al libro en escultura. Sigo creyendo en esa mesa de encuentros, en que los soportes son reflejos del tipo de diálogo que uno mantiene con el otro, una consecuencia del diálogo. Ahora mismo busco llevar a palco lenguajes con que trabajo: poemas, letras de canciones, fotografías, objetos, videos y escenario, todo eso naturalmente con la presencia de músicos, arregladores, bailarines y una cantora, desde ya pensando en la edición de todo en un libro/cd/dvd/catálogo que de alguna manera se pueda mirar como un libro-objeto, sí, pero sin perjuicio del desfrute corriente de sus lenguajes. Como puedes notar, tengo otra lectura del tema, por la suma de lenguaje tal vez. Es como lo que hace, por ejemplo, Peter Greenaway en una película como The pillow book, en que arte y vida se mezclan en una relación intertextual intrigante.

MM Hemos estado hablando precisamente de ese proyecto que tendrá libro/cd/dvd/catálogo, y tenemos la intención de robar un banco, tema aparte que, mientras tanto, estamos practicando a través de esta entrevista. Dime, qué propuesta podemos adelantar en el tiempo a través de esta entrevista y que podrimos enviar a amigos y futuros mecenas. Abrirnos a un cooperativismo como el que se hacen entre diversas editoriales. Imagina que vas a describir las partes de ese proyecto respondiendo a qué, cómo, quiénes, cuándo. Espero de ese modo, con la idea del libro-objeto, probar que en verdad quien piensa fuera del libro tradicional está pensando en el presente y en el futuro de lectores curiosos. Como dijeron dos de los entrevistados, el libro-objeto, para ellos surge de la necesidad de conquistar audiencias jóvenes que asocian la lectura con algo aburrido (Dux) y comienza con los supuestos mandamientos escritos en una piedra. Es un gancho para ellos, en parte, teniendo claro que el libro-objeto también es un diálogo abierto, en continua búsqueda y movimiento. Entonces, cuenta.

FM Yo pienso que no puede haber nada más aburrido que salir a conquistar audiencias. No creo en la lectura como algo agotado. Lo que pasa es que escritores y mercado editorial llenaran el mundo de mala literatura. El lector está como perdido en medio a ese basural sin fin. Y lo digo exactamente como lector, y lector apasionado, que no comprende otra manera de serlo. Y que además no cree propiamente en lectura, sino en relectura. Lo que hago en esa suma de géneros y áreas de creación tiene que ver únicamente con mi hambre estética. Me preguntas sobre los proyectos en curso y son dos: por las Ediciones Andrómeda, de Costa Rica, está por salir un libro que se llama La efigie sospechosa, que reúne poemas y fotografías. Es un librito mágico que tiene la traducción de Marta Spagnuolo (Argentina), un prefacio de David Cortés Cabán (Puerto Rico) y al final el mismo editor, Alfonso Peña (Costa Rica) me hace una entrevista. Me encanta la idea de proporcionar un encuentro, en un mismo libro, de todos ellos, amigos en la vida y en el arte. El otro proyecto, sí, este necesita de un mecenas, es la grabación de un disco reuniendo los compositores con quien he trabajado como autor de letras de canciones. El disco debe incluir también un catálogo con un ensayo fotográfico. La idea es un poco más amplia porque al disco debe sumarse la producción de un show con músicos, videos y la creación de un escenario a partir de mis fotos y objetos. El proyecto se llama Amores visibles invisibles, y tiene que ver con esa relación entre luces y sombras que es el sello sagrado del amor. No creo en el arte como un gancho, sino como un pescado. No es la oportunidad, sino el alimento.
Madeline Millán (Puerto Rico, 1965). Escritora y traductora, ha publicado cuatro libros de poesía: Para no morir por segunda vez (2002),  De toros y estrellas (2004), Leche/Milk (2008; Premio Nacional de Poesía: Pen Club de Puerto Rico) y 365 esquinas (2009) de poesía y narrativa. Editó una revista de cine latinoamericano, titulada Entreextremos. Coordinó durante varios años las lecturas bilingües de poesía en “Cornelia's Street Café”. De esa etapa surge y edita Noches de Cornelia/Nights of Cornelia (2008). Es profesora en FIT/SUNY. Contacto: mmillanvega@yahoo.com. Página ilustrada con obras del artista Ramón Oviedo (República Dominicana).

El período de enero de 2010 hasta diciembre de 2011 Agulha Revista de Cultura cambia su nombre para Agulha Hispânicabajo la coordinación editorial general de Floriano Martins, para atender la necesidad de circulación periódica de ideas, reflexiones, propuestas, acompañamiento crítico de aspectos relevantes en lo que se refiere al tema de la cultura en América Hispánica. La revista, de circulación bimestral, ha tratado de temas generales ligados al arte y a la cultura, constituyendo un fórum amplio de discusión de asuntos diversos, estableciendo puntos de contacto entre los países hispano-americanos que  posibiliten mayor articulación entre sus referentes. Acompañamiento general de traducción y revisión a cargo de Gladys Mendía y Floriano Martins.

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